José Vargas.
Minatitlán, Ver. –
Después de más de dos décadas de operación irregular y múltiples denuncias ciudadanas, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) puso punto final al basurero de Las Matas, al imponer este 8 de septiembre la clausura total definitiva del sitio de disposición final de residuos sólidos urbanos.
La medida deriva de una resolución sancionatoria emitida el 4 de septiembre, con la que se dictó no solo el cierre definitivo del relleno sanitario, sino también una multa de 18.1 millones de pesos y la obligación de presentar un programa formal de cierre, en cumplimiento con lo dispuesto por la NOM-083-SEMARNAT-2003.
El procedimiento inició meses atrás, tras una inspección realizada el 22 y 23 de abril de 2025, en la que inspectores federales confirmaron la violación reiterada a la normatividad ambiental en el manejo y disposición de residuos. Como medida urgente, se había exigido al responsable entregar un programa calendarizado de cierre, pero la orden fue ignorada, lo que derivó en el endurecimiento de las sanciones.
El basurero de Las Matas, con más de 20 años de funcionamiento en una superficie de 26 hectáreas, se convirtió en símbolo del descontrol ambiental en el sur de Veracruz. Desde sus orígenes fue instalado en una zona de alto riesgo ambiental y social: entre humedales, ductos de Pemex, líneas de alta tensión y a escasos metros del aeropuerto internacional de Minatitlán.
En los últimos años recibió un promedio de 280 toneladas diarias de basura provenientes de Minatitlán, Cosoleacaque y Coatzacoalcos, acumulando montañas de desechos que se convirtieron en foco de contaminación.
Organizaciones civiles y habitantes de la región denunciaron de forma constante los impactos negativos: malos olores, contaminación de suelos y aguas, proliferación de fauna nociva y riesgos para la salud pública. Sin embargo, las quejas fueron ignoradas durante años por las autoridades municipales y estatales.
Con esta clausura definitiva, el reto ahora será definir qué harán los municipios con las miles de toneladas de residuos que generan diariamente, en una región donde no existe infraestructura alterna suficiente para atender la demanda.
La Profepa ha señalado que vigilará el cumplimiento del programa de cierre que debe ser presentado, aunque la historia de impunidad y omisiones alrededor de Las Matas deja en duda si, esta vez, se concretará un verdadero saneamiento ambiental en la zona.






