José Vargas.
Santiago Sochiapan, Ver.—
Casi un año después de haber cometido un crimen que conmocionó a la región, Faustino “N” fue finalmente detenido por elementos de la Policía Ministerial adscritos a la comandancia de Playa Vicente, acusado del homicidio doloso de su propio hermano, a quien decapitó a machetazos durante una disputa familiar por tierras.
El asesinato ocurrió en septiembre de 2024, en el barrio La Santa Cruz del municipio de Santiago Sochiapan. Según las indagatorias, Faustino irrumpió en la vivienda de su hermano, Sabas López Lorenzo, de 40 años, en momentos en que este se encontraba en estado de ebriedad. Frente a varios miembros de la familia, la discusión escaló hasta convertirse en una escena de violencia extrema.
Un video que circuló en redes sociales captó los momentos previos al crimen. En las imágenes se observa a ambos hermanos discutiendo acaloradamente, hasta que Faustino desenfunda un machete tipo moruna y Sabas intenta defenderse con una vara. Sin embargo, la resistencia fue inútil. El ataque fue certero y brutal: tras perder el equilibrio, Sabas cayó al suelo y fue en ese instante cuando su hermano lo atacó en la cabeza hasta arrancársela.
Este miércoles, agentes ministeriales cumplimentaron una orden de aprehensión en contra de Faustino, quien fue ubicado y trasladado ante el juez de control que lo requería por el delito de homicidio doloso calificado.
De acuerdo con versiones de pobladores, el trasfondo del conflicto entre los hermanos fue una disputa agraria que llevaba años gestándose, sin que ninguna autoridad comunal o judicial interviniera a tiempo.
Este crimen no solo estremeció a Santiago Sochiapan, sino que dejó marcada a toda una comunidad que hoy exige justicia y soluciones duraderas para los conflictos por tenencia de la tierra que, como en este caso, pueden terminar en tragedias familiares.
Faustino “N” enfrentará su proceso penal bajo la acusación de haber perpetrado un homicidio atroz que, además del daño irreparable a su propia familia, dejó en evidencia el peligro de dejar escalar los conflictos comunitarios sin mediación ni intervención oportuna.
