Ciudad de México
Iván Archivaldo “N”, alias ‘El Chapito’, hijo de Joaquín Guzmán Loera y líder de una célula de un cártel, forma parte junto a siete operadores más de la misma organización, de los más buscados por la Administración para el Control de Drogas (DEA) de Estados Unidos.
Por Iván Archivaldo ofrecen hasta 10 millones de dólares de recompensa por información que lleve a su captura.
Oscar Noé “N”, conocido como ‘Panu’, líder de un grupo, guardaespaldas y sicarios personales de la célula delictiva que lidera Iván Archivaldo, señalados por fuentes de inteligencia militar en México de haber participado en el operativo para liberar a Ovidio “N” cuando fue aprehendido en Culiacán, Sinaloa, el 17 de octubre de 2019; también tiene cargos en su contra por conspirar para traficar fentanilo, lavado de dinero, delincuencia organizada y posesión de armas de fuego.
Por él, se ofrecen hasta cuatro millones de dólares por información que ayude a dar con su paradero.
Kun Jiang, originario de China, es acusado de tráfico de fentanilo y lavado de dinero. Identificado por autoridades de Estados Unidos como uno de los principales proveedores de precursores químicos para que el cártel mexicano produzca fentanilo. Por él ofrecen hasta un millón de dólares, al igual que por los demás cinco operadores de la célula que lidera Iván Archivaldo.
Carlos Omar “N”, detenido y con un juicio de extradición pendiente en Colombia, es señalado como encargado de los laboratorios químicos de drogas clandestinos del cárcel mexicano. Es acusado de tráfico de drogas, posesión de armas de fuego y lavado de dinero.
Por otro lado, Silvano Francisco, detenido en Colombia, combate su proceso de extradición. Es acusado de tráfico de drogas, posesión de armas de fuego y lavado de dinero, al ser señalado como operador de los laboratorios clandestinos del cártel mexicano.
Liborio “N”, alias ‘El Karateca’ y Luis Javier “N”, ‘El Fourteen’, son acusados por exportar fentanilo a Estados Unidos.
Alan Gabriel “N”, incluido en la lista de los más buscados de la DEA, es acusado de tráfico de drogas, posesión de armas y lavado de dinero por su papel en el tráfico de fentanilo, de hecho, la misma DEA hizo compras de fentanilo a través de agentes encubiertos al propio Alan Gabriel “N”.